domingo, enero 01, 2023

¡REFLEXION POR AÑO NUEVO!

Al terminar un año, y empezar otro, debe llamarnos a la reflexión de cómo estamos viviendo:

Cada año nuevo es un año menos para vivir. Es una realidad que es imposible eludir.

Puedes obviar esto, pero no por eso seguirá vigente esta realidad.

Y cuando llegue el fin de nuestro peregrinaje en este mundo. Nunca debemos olvidar que existe un Dios a quien daremos cuenta del don de la vida que nos dio y del deber fielmente cumplido, porque en cada lugar que él nos ha puesto, requiere fidelidad.

Por tanto vivamos hoy responsablemente, que la vida tiene elementos como la salud, que hay que cuidar para vivir bien. Pueden faltar los demás elementos… pero si hay salud hay esperanza de que sea posible lograrlo. 

Por tanto: “Confía en el Señor con todo tu corazón, y no te apoyes en tu propio entendimiento” (Prov. 3:5 BA). ¡Y Un Feliz Año Nuevo! Con afecto Hno. Pío Pablo 

01. SER SEMEJANTE A JESÚS EN LA ORACIÓN (EGW) AUDIO. Dice Jesús: Pidan lo que deseen en mi nombre, y les será hecho. Al presentar mi nombre, dan testimonio de que me pertenecen, que son mis hijos e hijas, y el Padre los tratará como a su propio Hijo y los amará como me ha amado a mí. La oración por el pan cotidiano incluye no solamente el alimento para sostener el cuerpo, sino también el pan espiritual que nutrirá el alma para vida eterna. Jesús nos propone: “Trabajad no por la comida que perece, sino por la comida que a vida eterna permanece” Juan 6:27. Nos dice Jesús: “Yo soy el pan vivo que descendió del cielo; si alguno comiere de este pan, vivirá para siempre”. Juan 6:51. Nuestro Salvador es el pan de vida; cuando miramos su amor y lo recibimos en el alma, comemos el pan que desciende del cielo.

01. REFLEJEMOS A JESÚS “EN SU NATURALEZA DIVINO HUMANO” (EGW). AUDIO. La vida de Jesús como hombre sobre la tierra constituye el modelo que cada cristiano a de imitar. Su ejemplo, su perfecta obediencia, su vida inmaculada, y su amor por cada uno de nosotros ha de inspirarnos a buscar en Él el perdón de nuestras faltas, las fuerzas para una vida de victorias sobre el pecado y la sabiduría para nuestro desarrollo espiritual, mental y físico. Necesitamos también, reflejar a Jesús en nuestro hogar, en la comunidad, en nuestra misión, en nuestro estilo de vida. Las Sagradas Escrituras registran el caso de muchos hombres, mujeres y niños que en sus vidas reflejan a Jesús. Y Jesús quiere estar junto a nosotros en nuestras pruebas y darnos la liberación que anhelamos.