jueves, junio 18, 2020

REFLEXIÓN 271. LAMENTO DE LOS CAUTIVOS EN BABILONIA (Salmo 137).


El Salmo 137, es la experiencia de los cautivos en babilonia y su actitud más nacionalista que espiritual, ante el pedido de los enemigos a que entonasen un cantico de Sion…

1 JUNTO a los ríos de Babilonia, Allí nos sentábamos, y aun llorábamos, Acordándonos de Sion.
2 Sobre los sauces en medio de ella Colgamos nuestras arpas.
3 Y los que nos habían llevado cautivos nos pedían que cantásemos, Y los que nos habían desolado nos pedían alegría, diciendo: Cantadnos algunos de los cánticos de Sion.
4 ¿Cómo cantaremos cántico de Jehová En tierra de extraños?

5 Si me olvidare de ti, oh Jerusalén, Pierda mi diestra su destreza.
6 Mi lengua se pegue a mi paladar, Si de ti no me acordare; Si no enalteciere a Jerusalén Como preferente asunto de mi alegría.

7 Oh Jehová, recuerda contra los hijos de Edom el día de Jerusalén, Cuando decían: Arrasadla, arrasadla Hasta los cimientos.

8 Hija de Babilonia la desolada, Bienaventurado el que te diere el pago, De lo que tú nos hiciste.
9 Dichoso el que tomare y estrellare tus niños, Contra la peña. (Salmo 137).

Éste salmo presenta la actitud patriota del salmista en la cautividad. Pero no muestra porque estaban allá. El porque es la causa de su apostasía, de generaciones. Pero están sensibles al maltrato; pero no a lo importante de cumplir su misión. Misión para la cual fue levantado Israel; Ser la luz del mundo. 
Isa. 49:6.
La primera venganza que debería pedir es para ellos mismos, por haber dejado los caminos del Señor, y que no sería cosas del pasado; pues lo volverían a cometer en el futuro. 
Y finalmente con el rechazo del Mesías.
Pedir venganza de los enemigos, hasta no era necesario. Porque es la ley de la vida: “siembra y cosecha” Babilonia por su maldad cosechó destrucción, hasta dejar de ser.
Pero la forma como pedimos venganza ante Dios, de los enemigos; prueba la naturaleza espiritual que nos motiva y muestra de los que estamos hechos. Muestra, nuestro verdadero carácter.
Ministerio Hno. Pio

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