El Salmo 144 es un canto que ensalza el poder y el socorro de Dios tanto en la
guerra como en la paz. Termina con la
proclamación del gozo y la alegría que sienten los que sirven a Dios. (3CBA)
Salmo
de David.
1 BENDITO sea Jehová, mi roca, Quien
adiestra mis manos para la batalla, Y mis dedos para la guerra;
2
Misericordia mía y mi castillo, Fortaleza mía y mi libertador, Escudo mío, en
quien he confiado;
El que sujeta a mi pueblo debajo de mí.
El que sujeta a mi pueblo debajo de mí.
3 Oh
Jehová, ¿qué es el hombre, para que en él pienses, O el hijo de hombre, para
que lo estimes?
4 El
hombre es semejante a la vanidad; Sus días son como la sombra que pasa.
5 Oh
Jehová, inclina tus cielos y desciende; Toca los montes, y humeen.
6
Despide relámpagos y discípalos, Envía tus saetas y túrbalos.
7
Envía tu mano desde lo alto; Redímeme, y sácame de las muchas aguas,
De la mano de los hombres extraños,
De la mano de los hombres extraños,
8
Cuya boca habla vanidad, Y cuya diestra es diestra de mentira.
9 Oh
Dios, a ti cantaré cántico nuevo; Con salterio, con decacordio cantaré a ti.
10
Tú, el que da victoria a los reyes, El
que rescata de maligna espada a David su siervo.
11
Rescátame, y líbrame de la mano de los hombres extraños, Cuya boca habla vanidad,
Y cuya diestra es diestra de mentira.
Y cuya diestra es diestra de mentira.
12
Sean nuestros hijos como plantas crecidas en su juventud,
Nuestras hijas como esquinas labradas como las de un palacio;
Nuestras hijas como esquinas labradas como las de un palacio;
13
Nuestros graneros llenos, provistos de toda suerte de grano;
Nuestros ganados, que se multipliquen a millares y decenas de millares en nuestros campos;
Nuestros ganados, que se multipliquen a millares y decenas de millares en nuestros campos;
14
Nuestros bueyes estén fuertes para el trabajo; No tengamos asalto, ni que hacer
salida,
Ni grito de alarma en nuestras plazas.
Ni grito de alarma en nuestras plazas.
15
Bienaventurado el pueblo que tiene esto;
Bienaventurado el pueblo cuyo Dios es Jehová.
(Salmo 144).
Bienaventurado el pueblo cuyo Dios es Jehová.
(Salmo 144).
La confianza
en la vida es determinante para cualquier acción que realicemos
y consecuentemente nos vaya bien.
y consecuentemente nos vaya bien.
El
salmista confía en Dios, como que se apoya en la roca. La roca lo usa también el
Señor, como símbolo de la fe real, en Mat. 7:24-27. Donde enseña la construcción
de la fe para salvación o perdición. Que se define en los versículos 21-23.
El salmo
comienza bendiciendo a Jehová, y consecuentemente como quien le dio éxito en
sus emprendimientos personales y públicos. Y entiende que el poder que tiene
como rey,
no proviene de él, sino de Dios.
no proviene de él, sino de Dios.
Que
interesante lección por aprender para los gobernantes del mundo
y cualquiera que ostenten cargos de poder.
y cualquiera que ostenten cargos de poder.
La pregunta
importante que le hace David a Dios es:
¿qué es el hombre, para que en él pienses,
O el hijo de hombre, para que lo estimes?...
¿qué es el hombre, para que en él pienses,
O el hijo de hombre, para que lo estimes?...
¿Qué
es el hombre?, ¿Quién soy yo?
Aquí se
presenta la base para el valor humano y la importancia de amarse uno mismo.
Cuantos problemas se evitaría la humanidad, si solo entendiera este punto:
“que somos hijos de Dios, y valemos mucho”.
Valemos el precio que se pagó por nuestro rescate a saber, la sangre de su hijo.
Que voluntariamente se entregó para salvarnos. (Luc. 19:10; Fil. 2:5-11.
Cuantos problemas se evitaría la humanidad, si solo entendiera este punto:
“que somos hijos de Dios, y valemos mucho”.
Valemos el precio que se pagó por nuestro rescate a saber, la sangre de su hijo.
Que voluntariamente se entregó para salvarnos. (Luc. 19:10; Fil. 2:5-11.
A pesar
de que somos y frágiles como la hierba y la flor que desaparece; valemos mucho,
para que Dios, dedique tiempo para sostenernos y protegernos y vela por nuestro
bienestar en general.
Vers. 5-11. En la segunda parte, el salmista expresa que Dios
es tan poderoso, que ni la naturaleza puede contenerlo. Porque lo alborota con
su presencia. Y como tal le pide que use ese poder para sacarlo de problemas y
de la amenaza de los enemigos extraños, que usan la vanidad y la mentira
en contra de su ungido.
en contra de su ungido.
Y consecuentemente
David le alabará con instrumentos de cuerda y le dirá: “que la victoria es de
Dios, y lo ha librado de la maligna espada de sus enemigos. Y reitera su pedido
de libertad de la lengua malvada de sus enemigos.
En los vers. 12-15, se presenta el cuadro de una nación que recibe
grandes bendiciones de Dios.
La familia, los campos y los graneros han prosperado abundantemente. 3CBA
La familia, los campos y los graneros han prosperado abundantemente. 3CBA
En
esta última parte, el salmista expresa con gratitud y gozo, que solo Dios,
puede hacer posible que nuestros hijos e hijas sea bellos exterior e
interiormente. Pero
no es casual que los hijos tengan caracteres bellos, es un trabajo mancomunados
entre Dios y los padres.
¿Y cual es nuestro deber como padres?
Pues es
presentarlos cada día a Dios, antes de iniciar nuestras actividades cotidianas
y al finalizar el mismo. Por medio de canticos, oración y estudio de su palabra.
Y Luego
está también estas 3 partes que no debemos obviar: Instrucción en el temor de
Dios,
Buen ejemplo de los padres y la disciplina implícita o en último recurso con mucha oración la Explícita.
Buen ejemplo de los padres y la disciplina implícita o en último recurso con mucha oración la Explícita.
También
se resalta la bendición material que deriva de confiar en Jehová, como muestro
Dios. bendiciones en la cosecha, en los ganados que se multiplican a gran
escala. Y las herramientas
para que la siembra sea posible, los bueyes que aran la tierra.
para que la siembra sea posible, los bueyes que aran la tierra.
Ayer y
hoy, esta forma de ver la economía; están vital. Porque gracias a esas bendiciones
podemos alimentarnos, a pesar que nosotros no sembremos; pero otros lo hacen.
¿Qué comeríamos, si el campesino no hiciera esa labor? ¿comeríamos nuestro dinero?
¿Qué comeríamos, si el campesino no hiciera esa labor? ¿comeríamos nuestro dinero?
Es vital
agradecer a Dios, por el pan diario y por los que los siembran, cultivan y cosechan
y lo trasladan hasta llegar a nosotros. Amen.
Otro punto
importante que destaca también el salmista es que de nuestro trabajo no se
beneficie otro, sino que lo disfrutemos. Se refiere al asalto que están común
por doquier. Pero como en los tiempos del salmista eran en gran escala las
invasiones de ejércitos de enemigos y salteadores; hoy no es diferente. Por eso
es menester pedir siempre la protección de Dios, así estaremos seguro siempre.
“No
hay mayor felicidad que la de saber que pertenecemos a Dios y él a nosotros”.
3CBA
Por eso
nos unimos al salmista y terminamos esta reflexión diciendo: “Bienaventurado el
pueblo que tiene esto; Bienaventurado el pueblo cuyo Dios es Jehová”. Amen y
amen.
Ministerio
Hno. Pio
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