martes, abril 23, 2019

REFLEXIÓN 103. LOS ENGAÑOS DE SATANÁS


Para muchos la existencia de este ser, es un mito, por tanto no existe; que solo es un mal pensamiento, 
o una conducta mala…etc. 

 El siguiente material deja claro de quien se trata y cuál es su afán en la vida de la humanidad. Y no es un pensamiento o conducta mala solamente; sino es un ángel caído, es el autor que influencia a ello... Es la mente más brillante puesto del lado del error… 

SATANÁS comenzó con sus engaños en el Edén. Dijo a Eva: 
"No moriréis". Esa fue su primera lección acerca de la inmortalidad del alma, y ha continuado difundiendo ese engaño desde entonces hasta hoy, y seguirá haciéndolo hasta que termine el cautiverio 
de los hijos de Dios. 
 Se me señaló a Adán y Eva en el Edén. Comieron del árbol prohibido, y entonces la espada de fuego fue puesta en torno del árbol de la vida, y fueron expulsados del huerto para que no comieran de ese árbol y llegaran a ser pecadores inmortales. Ese fruto debía perpetuar la inmortalidad. 

 Oí que un ángel preguntaba: "¿Qué miembro de la familia de Adán ha pasado a través de la espada de fuego y ha comido del árbol dé la vida?" Oí que otro ángel contestaba: "Ni uno solo de los miembros de la familia de Adán ha pasado a través de esa espada de fuego ni ha comido del fruto de aquél árbol; por lo tanto no hay un solo pecador inmortal". 

 El alma que pecare, morirá de muerte eterna, una muerte en la cual no hay esperanza de resurrección; y entonces la ira de Dios se apaciguará. 

 Me asombraba que Satanás pudiera tener tanto éxito e hiciese creer a los hombres que las palabras de Dios que dicen: "El alma que pecare, esa morirá" (Eze. 18: 4), significan que el alma que pecare no morirá, sino que vivirá eternamente sometida a tormentos. 408 

Dijo el ángel: "La vida es vida, ya sea que se la viva en medio del dolor o de la felicidad. En la muerte no hay dolor, ni gozo ni odio". 


Satanás ordenó a sus ángeles que hicieran un esfuerzo especial para difundir la mentira que fue dicha por primera vez a Eva en el Edén: 
"No moriréis". Y como la gente aceptó ese error, y fue inducida a creer que el hombre es inmortal, Satanás le hizo creer además que el pecador habría de vivir sometido a tormentos eternos. 
 Entonces quedó preparado el camino para que el enemigo obrara por medio de sus representantes y presentase a Dios ante la gente como un tirano vengativo, que sumerge en el infierno a todos los que no le agradan, y les hace sentir eternamente su ira; y que mientras sufren indecible angustia y se retuercen en medio de las llamas eternas, los mira con satisfacción. Satanás sabía que si se aceptaba ese error, muchos odiarían a Dios en vez de amarlo y adorarlo, Y que muchos serían inducidos a creer que las amonestaciones de la Palabra de Dios no se cumplirían literalmente, porque sería contrario a su carácter bondadoso y amante arrojar al tormento eterno a los seres que creó. 


 *OTRA IDEA EXTREMISTA, que Satanás ha logrado que la gente adopte es la de pasar por alto totalmente la justicia de Dios y las advertencias de su Palabra, para presentarlo 
LLENO DE MISERICORDIA, de manera que finalmente nadie perezca, sino que todos, santos y pecadores, se salven en su reino. 
 Como consecuencia de los errores populares acerca de la inmortalidad del alma y el infierno eterno, Satanás se aprovecha de otra clase de gente y la induce a creer que la Biblia no es un libro inspirado. 
Creen que enseña muchas cosas buenas; pero no pueden confiar en ella ni amarla, porque se 409 les ha enseñado que presenta la doctrina DEL TORMENTO ETERNO. 


 A OTRA CLASE DE GENTE Satanás la lleva aún más lejos: a negar la existencia de Dios. Les parece que no hay compatibilidad entre el carácter del Dios de la Biblia y el hecho de que inflija terribles torturas por toda la eternidad a una porción de la familia humana. Por lo tanto rechazan la Biblia y a su Autor, y consideran que la muerte es un sueño eterno. 


 HAY TODAVÍA OTRA CLASE DE SERES HUMANOS temerosa y tímida. Satanás los induce a cometer pecados, y después insiste en que la paga del pecado no es muerte, sino vida en medio de horribles tormentos que tendrán que soportar por los siglos sin fin de la eternidad. Al magnificar así ante sus débiles inteligencias los horrores de un infierno inacabable, se posesiona de sus mentes y entonces pierden
 la razón. 
 A continuación el enemigo y sus ángeles se regocijan, y el incrédulo y el ateo se unen para cubrir de oprobio al cristianismo. Sostienen que esos males son resultados lógicos de creer en la Biblia y en su Autor, cuando son la consecuencia de aceptar errores populares. 


 LAS ESCRITURAS SON UNA SALVAGUARDIA 
Vi que la hueste celestial se indignó frente a esta actitud tan descarada de Satanás. 
Pregunté por qué se permitía que todos esos engaños causaran sus efectos en la mente humana cuando los ángeles de Dios eran poderosos y, si se les ordenaba, podían fácilmente quebrantar 
el poder del enemigo. 

 Entonces vi que Dios sabia que Satanás iba a poner en práctica todas sus tretas para destruir al hombre. 
Por eso permitió que se escribiera su Palabra, para 410 presentar sus propósitos acerca de la raza humana con tanta claridad que 
ni los más débiles necesitaran errar. 
Después de dar su Palabra a los hombres, la preservó cuidadosamente de la destrucción por parte de Satanás y sus ángeles, o por parte de cualquiera de sus agentes o representantes. Mientras otros libros podían ser destruidos, éste debía ser inmortal. 

Y cerca del fin del tiempo, cuando los engaños del enemigo aumentaran, se iba a multiplicar de tal manera que todos los que lo quisieran podrían obtener un ejemplar, y si estaban dispuestos podían armarse contra los engaños y los prodigios mentirosos de Lucifer. 

 VI QUE DIOS HABÍA PROTEGIDO la Biblia en forma especial; sin embargo, cuando sólo había pocos ejemplares, algunos eruditos en ciertos casos modificaron las palabras con la idea de aclarar su sentido, pero en realidad estaban confundiendo lo que era claro al torcer su significado para que concordara con sus opiniones establecidas, condicionadas a su vez por la tradición.

 “Pero vi que la Palabra de Dios, en conjunto, es una cadena perfecta, y que una porción se ensambla con la otra y la explica”. 

Los verdaderos buscadores de la verdad no necesitan errar; porque la Palabra de Dios no es sólo clara y sencilla al presentar el camino de la vida, SINO QUE SE DA EL ESPÍRITU SANTO como guía para comprender el camino de la vida que ella revela. 

 Vi que los ángeles de Dios nunca deben dominar la voluntad. 
 DIOS PONE DELANTE DEL HOMBRE LA VIDA Y LA MUERTE. Él Puede Elegir. 

 Muchos desean la vida, pero siguen avanzando por el camino ancho. Deciden rebelarse contra el gobierno de Dios, a pesar de su gran misericordia y la compasión que manifestó al dar a su Hijo para que muriera por ellos. Los que no aceptan la salvación adquirida a un precio tan 411 exorbitante serán castigados. 

 PERO VI QUE DIOS NO LOS CONFINARÁ EN EL INFIERNO PARA QUE SUFRAN ETERNAMENTE, ni tampoco los llevará al cielo; porque si los pusiera en contacto con los puros y santos SERÍAN SUMAMENTE DESGRACIADOS. 

 En cambio, los destruirá por completo y serán como si nunca hubieran existido; entonces su justicia quedará satisfecha. Hizo al hombre del polvo de la tierra, y los desobedientes e impíos serán consumidos por fuego y volverán a ser polvo. 

 Vi que la bondad y la compasión de Dios con respecto a este asunto debieran inducir a todos a admirar su carácter y a adorar su santo nombre. Cuando los impíos hayan sido raídos de la tierra, toda la hueste celestial dirá: "¡Amén!"

 “Satanás observa con gran satisfacción a los que profesan el nombre de Cristo y sin embargo se aferran tenazmente a los engaños que él mismo ha originado”.

 Sigue siendo su tarea elucubrar nuevos engaños, y su poder y su arte en este sentido aumentan continuamente. Indujo a sus representantes, los papas y sacerdotes, a exaltarse a sí mismos y a incitar al pueblo a perseguir acerbamente y destruir a los que no querían aceptar sus errores. ¡Oh! ¡Cuántos sufrimientos y agonías tuvieron que soportar los preciosos seguidores de Cristo! Los ángeles han llevado un registro exacto de todo esto. 

 CON REGOCIJO SATANÁS Y SUS DEMONIOS dijeron a los ángeles que servían a los santos que sufrían que todos ellos iban a ser muertos para que no quedara un solo cristiano verdadero en la tierra. 

 Vi que entonces la iglesia de Dios era pura. No había peligro de que entraran en ella hombres de corazón corrupto, porque el verdadero cristiano, que se atrevía a declarar su fe, corría peligro de ser llevado al potro, a la hoguera y a la tortura que Satanás y sus malos ángeles podían inventar o inspirar a la mente humana. 412 
 (La Historia de la Redención Capitulo 56). EGW MHP

domingo, abril 21, 2019

REFLEXIÓN 102. CUANDO LLEGAN LAS ENFERMEDADES DEBEMOS TENER PRESENTE. MHP

 

*La Oración no cambiará en la mayoría de los casos,
 la violación a las 
Leyes Morales, Naturales
 Y Leyes Físicas, que Dios estableció
Para Nuestro Beneficio. 

Hay leyes de salud que debemos respetar a lo largo 
de nuestra vida diaria.
 Si la desobedecemos cosecharemos las consecuencias. 

Dios perdona nuestro pecado,
 pero no de las consecuencias. 

 Pero excepcionalmente Dios actúa a pesar de sus leyes. 
A eso llamamos MILAGRO, Pero es mínimo. 
 Dios muestra en su palabra 
MAS LA MEDICINA PREVENTIVA 
QUE CURATIVA
 Por eso nos ha mostrado como debemos vivir. 
Que comer, 
que beber, 
como vestirse, 
como recrearse…etc 

*Pero es cierto también que heredamos enfermedades de nuestros ancestros, pero es, en un porcentaje mínimo. 
Lo demás es por nuestro estilo de vida. 

 LA PREGUNTA ES: 
¿Cómo estoy viviendo hoy?
 ¿Cómo me alimento? ¿es saludable? 
 Recuerda la fe va de la mano con el creer 
y el obedecer a la palabra de Dios.

 “No os engañéis; Dios no puede ser burlado: pues todo lo que el hombre sembrare, eso también segará”. Gal. 6:7.
Ministerio Hno. Pio 


REFLEXIÓN 101. ACTITUD ANTE LA MUERTE Y EL JUICIO. MHP


 5 Porque los que viven saben que han de morir; pero los muertos nada saben, ni tienen más paga; porque su memoria es puesta en olvido. 6 También su amor y su odio y su envidia fenecieron ya; y nunca más tendrán parte en todo lo que se hace debajo del sol... 10 Todo lo que te viniere a la mano para hacer, hazlo según tus fuerzas; porque en el Seol, adonde vas, no hay obra, ni trabajo, ni ciencia, ni sabiduría. Eclesiastés 9:5-10. 

 *Cuando la muerte se acerca si no has vivido en paz con la gente y con Dios. El terror se apoderará de tu ser. Por eso arregla tus cuentas hoy, mientras tienes fuerzas y claridad mental. 
 * La muerte no ofrece una perspectiva agradable, pero si llega cuando el espíritu de la persona está en íntima comunión con el Espíritu de Dios, no hay temor. Aunque uno deba morir en la soledad, lejos de toda ayuda y compasión humanas, si puede morir en la presencia de Dios, ése es un fin agradable, lleno de esperanza. CBA 

 LA REALIDAD DEL JUICIO.
 En aquel día; Dios te juzgará de acuerdo a la luz que te dio. 
Más ni menos. 

 Si lees Mateo 25:31-46. 
Podrás darte cuenta que la gente es juzgado 
en relación con su prójimo. 

¡PERO ESO NO ES TODA LA HISTORIA!

 En Mateo. 19:16,17. 
Jesús le dice al joven rico. 
si quiere ser salvo y tener vida eterna. 
Tiene que guardar los 10 mandamientos. 

En Romanos 2:14.16. 
Pablo habla de ser juzgado en aquel día 
por la ley escrito en la conciencia. 

 *Como podemos ver, no todos son juzgados de la misma forma. Sino conforme a la luz que tuvieron y vivieron fieles a esa luz. 
 *Los gentiles o naciones que nunca tuvieron contacto con la cristiandad o el Israel antiguo. Serán juzgados por su relación con su prójimo de cómo lo trataron. 
Ósea por la media tabla de la ley. 

 *TODOS EN MAYOR O MENOR GRADO SERÁN JUZGADOS POR LA LEY MORAL. 
• Así hablad, y así haced, como los que habéis de ser juzgados por la ley de la libertad... Y andaré en LIBERTAD, Porque busqué tus mandamientos. Santiago 2:12; Salmos 119:45. 
• El fin de todo el discurso oído es este: Teme a Dios, y guarda sus mandamientos; porque esto es el todo del hombre. Porque Dios traerá toda obra a juicio, juntamente con toda cosa encubierta, sea buena o sea mala. Eclesiastés 12:13,14. MHP

jueves, abril 11, 2019

CAPÍTULO 26. APOLOS EN CORINTO.

Basado en Hechos 18:18-28. 

DESPUÉS de dejar Corinto, el próximo escenario de la labor de Pablo fue Éfeso. Estaba en camino a Jerusalén, para asistir a una fiesta próxima; y su estada en Éfeso fue necesariamente breve. Razonó en la sinagoga con los judíos, quienes fueron impresionados tan favorablemente que le rogaron que continuara sus labores entre ellos. Su plan de visitar a Jerusalén le impidió detenerse entonces, mas prometió volver a visitarles, "queriendo Dios." 
AQUILA Y PRISCILA LE HABÍAN ACOMPAÑADO A ÉFESO, y los dejó allí para que continuaran la obra que había comenzado. 

SUCEDIÓ QUE "LLEGÓ ENTONCES A ÉFESO UN JUDÍO, LLAMADO APOLOS, natural de Alejandría, varón elocuente, poderoso en las Escrituras." 
HABÍA OÍDO La Predicación De Juan El Bautista, había recibido el bautismo del arrepentimiento, y era un testigo viviente de que el trabajo del profeta no había sido inútil. El informe de la Escritura respecto a Apolos es que "era instruido en el camino del Señor; y ferviente de espíritu, hablaba y enseñaba diligentemente las cosas que son del Señor, enseñado solamente en el bautismo de Juan."
Mientras estaba en Éfeso, Apolos "comenzó a hablar confiadamente en la sinagoga." Entre los oyentes estaban Aquila y Priscila, quienes, percibiendo que no había recibido todavía toda la luz del Evangelio, "le tomaron, y le declararon más particularmente el camino de Dios."

 POR SU ENSEÑANZA adquirió una comprensión más clara de las Escrituras, y llegó a ser uno de los abogados más capaces de la fe cristiana.

APOLOS DESEABA IR A ACAYA, y los hermanos de Éfeso "escribieron 219 a los discípulos que le recibiesen" como a un maestro en plena armonía con la iglesia de Cristo. Fue a Corinto, donde, en trabajo público y de casa en casa, "con gran vehemencia convencía . . . a los Judíos, mostrando por las Escrituras que Jesús era el Cristo." Pablo había sembrado la semilla de la verdad; Apolos ahora la regaba.  

EL ÉXITO QUE TUVO APOLOS en la predicación del Evangelio indujo a algunos creyentes a exaltar sus labores por encima de las de Pablo. Esta comparación de un hombre con otro produjo en la iglesia un espíritu partidista que amenazaba impedir grandemente el progreso del Evangelio.

DURANTE EL AÑO Y MEDIO QUE PABLO HABÍA PASADO EN CORINTO, había presentado intencionalmente el Evangelio en su sencillez. No "con altivez de palabra, o de sabiduría," había ido a los corintios, sino con temor y temblor, y "con demostración del Espíritu y de poder," había declarado "el testimonio de Cristo," para que su fe no estuviese "fundada en sabiduría de hombres, más en poder de Dios." (1 Cor. 2:1,4,5).

PABLO HABÍA ADAPTADO necesariamente su método de enseñanza a la condición de la iglesia. "Yo, hermanos, no pude hablaros como a espirituales ­les explicó más tarde,- sino como a carnales, como a niños en Cristo. Os dí a beber leche, y no vianda: porque aún no podíais, ni aun podéis ahora." (1 Cor. 3:1,2). Muchos de los creyentes corintios habían sido lentos para aprender las lecciones que él se había esforzado por enseñarles. Su progreso en el conocimiento espiritual no había estado en proporción con sus privilegios y oportunidades. 
Cuando hubieran tenido que estar muy adelantados en la vida cristiana, y hubieran debido ser capaces de comprender y practicar las verdades más profundas de la Palabra, estaban donde se hallaban los discípulos cuando Cristo les dijo: "Aun tengo muchas cosas que deciros, mas ahora no las podéis llevar." (Juan 16:12.) 

LOS CELOS, las malas sospechas y la acusación habían cerrado el corazón de muchos de los creyentes corintios a la obra plena del Espíritu Santo, el cual "todo lo escudriña, 220 aun lo profundo de Dios." (1 Cor. 2:10.) Por sabios que pudieran ser en el conocimiento mundano, no eran sino niños en el conocimiento de Cristo.  

HABÍA SIDO LA OBRA DE PABLO instruir a los conversos corintios en los rudimentos, el alfabeto mismo, de la fe cristiana. Se había visto obligado a instruirlos como a quienes ignoraban las operaciones del poder divino en el corazón. En aquel tiempo eran incapaces de comprender los misterios de la salvación; porque "el hombre animal no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque le son locura; y no las puede entender, porque se han de examinar espiritualmente." (1 Cor. 2:14.).
 PABLO se había esforzado por sembrar la semilla, y otros debían regarla.  Los que le siguieran debían llevar adelante la obra desde el punto donde él la había dejado, dando luz y conocimiento espirituales al debido tiempo, cuando la iglesia fuera capaz de recibirlos.

Cuando el apóstol emprendió su trabajo en Corinto, comprendió que debía presentar de la manera más cuidadosa las grandes verdades que deseaba enseñar. 

SABÍA que entre sus oyentes habría orgullosos creyentes en las teorías humanas y exponentes de los falsos sistemas de culto, que estaban palpando a ciegas, esperando encontrar en el libro de la naturaleza teorías que contradijeran la realidad de la vida espiritual e inmortal revelada en las Escrituras. 

SABÍA también que habría críticos que se esforzarían por refutar la interpretación cristiana de la palabra revelada, y que los escépticos tratarían al Evangelio de Cristo con escarnio y burla.

MIENTRAS se esforzaba por conducir almas al pie de la cruz, Pablo no se atrevió a reprender directamente a los licenciosos, y a mostrar cuán horrible era su pecado a la vista de un Dios Santo. Más bien les presentó el verdadero objeto de la vida, y trató de inculcarles las lecciones del Maestro divino, que, si eran recibidas, los elevarían de la mundanalidad y el pecado a la pureza y la justicia.  

SE EXPLAYÓ ESPECIALMENTE en la piedad práctica y en la santidad que deben tener aquellos que serán 221 considerados dignos de un lugar en el reino de Dios. Anhelaba ver penetrar la luz del Evangelio de Cristo en las tinieblas de su mente, para que pudieran ver cuán ofensivas a la vista de Dios eran sus prácticas inmorales. Por lo tanto, la nota tónica de su enseñanza entre ellos era Cristo y él crucificado.

 TRATÓ DE MOSTRARLES que su más ferviente estudio y su mayor gozo debía ser la maravillosa verdad de la salvación por el arrepentimiento para con Dios y la fe en el Señor Jesucristo.

EL FILÓSOFO se aparta de la luz de la salvación, porque ella cubre de vergüenza sus orgullosas teorías;

EL MUNDANO rehúsa recibirla porque ella lo separaría de sus ídolos terrenales.  

PABLO vio que el carácter de Cristo debía ser entendido antes que los hombres pudieran amarle, o ver la cruz con los ojos de la fe. Aquí debe comenzar ese estudio que será la ciencia y el canto de los redimidos por toda la eternidad. 

Solamente a la luz de la cruz puede estimarse el valor del alma humana.

LA INFLUENCIA REFINADORA DE LA GRACIA DE DIOS CAMBIA EL TEMPERAMENTO NATURAL DEL HOMBRE. El cielo no sería deseable para las personas de ánimo carnal; sus corazones naturales y profanos no serían atraídos por aquel lugar puro y santo; y si se les permitiera entrar, no hallarían allí cosa alguna que les agradase. Las propensiones que dominan el corazón natural deben ser subyugadas por la gracia de Cristo, antes que el hombre caído sea apto para entrar en el cielo y gozar del compañerismo de los ángeles puros y santos. Cuando el hombre muere al pecado y despierta a una nueva vida en Cristo, el amor divino llena su corazón; su entendimiento se santifica; bebe en una fuente inagotable de gozo y conocimiento; y la luz de un día eterno brilla en su senda, porque con él está continuamente la Luz de la vida.

PABLO HABÍA TRATADO DE IMPRESIONAR en la mente de los hermanos corintios el hecho de que él y los ministros que estaban asociados con él no eran sino hombres comisionados por Dios para enseñar la verdad; que todos estaban ocupados en la misma obra; y que dependían igualmente de Dios para tener 222 éxito en sus labores. 

LA DISCUSIÓN que se había levantado en la iglesia en cuanto a los méritos relativos de los diferentes ministros, no estaba de acuerdo con la voluntad de Dios, sino que era el resultado de abrigar los atributos del corazón natural. "Porque diciendo el uno: Yo cierto soy de Pablo: y el otro: yo de Apolos; ¿no sois carnales? ¿Qué pues es Pablo? ¿y qué es Apolos? Ministros por los cuales habéis creído; y eso según que a cada uno ha concedido el Señor. Yo planté, Apolos regó; mas Dios ha dado el crecimiento. Así que, ni el que planta es algo, ni el que riega; sino Dios, que da el crecimiento." (1 Cor. 3:4-7).

PABLO fue quien predicó primero el Evangelio en Corinto y quien había organizado la iglesia allí. Esta era la obra que el Señor le había asignado. Más tarde, por la dirección de Dios, otros obreros fueron enviados allí, para que ocuparan su debido lugar. La semilla sembrada debía regarse, y esto debía hacerlo Apolos. Siguió a Pablo en su obra, para dar instrucción adicional y ayudar al crecimiento de la semilla sembrada. Conquistó los corazones del pueblo, pero era Dios el que daba el crecimiento.  

NO es el poder humano, SINO el divino, el que obra la transformación del carácter. 

LOS QUE PLANTAN y los que riegan, no hacen crecer la semilla; trabajan bajo la dirección de Dios, como sus agentes señalados, y cooperan con él en su obra. Al Artífice maestro pertenecen el honor y la gloria del éxito.

Los siervos de Dios no poseen todos los mismos dones, pero son todos obreros suyos. Cada uno debe aprender del gran Maestro, y comunicar entonces lo que ha aprendido. Dios ha dado a cada uno de sus mensajeros un trabajo individual. Hay diversidad de dones, pero todos los obreros deben estar unidos armoniosamente, dominados por la influencia santificadora del Espíritu Santo. A medida que den a conocer el Evangelio de la salvación, muchos serán convencidos y convertidos por el poder de Dios. El instrumento humano se esconde con Cristo en Dios, y Cristo aparece como el principal entre diez mil, y todo él codiciable. 223 "Y el que planta y el que riega son una misma cosa; aunque cada uno recibirá su recompensa conforme a su labor. Porque nosotros, coadjutores somos de Dios; y vosotros labranza de Dios sois, edificio de Dios sois." (1 Cor. 3:8,9).

EN ESTE PASAJE EL APÓSTOL COMPARA LA IGLESIA A UN CAMPO CULTIVADO, en el cual trabajan los viñedos, cuidando de la viña del plantío del Señor; y también con un edificio, que debe crecer para convertirse en un templo santo para el Señor. Dios es el Obrero maestro, y él ha señalado a cada uno su obra. 
Todos han de trabajar bajo su supervisión, permitiéndole obrar en favor de sus siervos y por medio de ellos. Les da tacto y habilidad, y si prestan oído a su instrucción, corona de éxito sus esfuerzos.

LOS SIERVOS DE DIOS HAN DE TRABAJAR JUNTOS, fusionando sus personalidades en una forma bondadosa y cortés, previniéndose con honra los unos a los otros. (Rom. 12:10). No debe haber crítica, falta de bondad; no debe hacerse trizas el trabajo de otros, ni ha de haber distintos partidos. Cada hombre a quien el Señor ha encomendado su mensaje tiene su trabajo específico. Cada uno tiene su propia individualidad que no debe fundirse en la de ningún otro. Sin embargo, cada uno debe trabajar en armonía con sus hermanos. 

EN SU SERVICIO, LOS OBREROS DE DIOS HAN DE SER ESENCIALMENTE UNO. Ninguno ha de erigirse en modelo ni debe hablar despectivamente de sus colaboradores o tratarlos como inferiores. Bajo Dios, cada uno ha de hacer su trabajo señalado, respetado, amado y animado por los otros obreros. Juntos han de llevar adelante la obra hasta completarla.

Estos principios se exponen extensamente en la primera epístola de Pablo a la iglesia de Corinto.  

EL APÓSTOL SE REFIERE A LOS "MINISTROS DE CRISTO" como "dispensadores de los misterios de Dios;" y de su trabajo declara: "Se requiere en los dispensadores, que cada uno sea hallado fiel. Yo en muy poco tengo el ser juzgado de vosotros, o de juicio humano; y ni aun yo me juzgo. Porque aunque de nada tengo mala conciencia, no por eso soy justificado; mas el que me juzga, el Señor es. 224 Así que, no juzguéis nada antes de tiempo, hasta que venga el Señor, el cual también aclarará lo oculto de las tinieblas, y manifestará los intentos de los corazones: y entonces cada uno tendrá de Dios la alabanza." (1 Cor. 4:1-5).

Ningún ser humano ha sido autorizado para juzgar a los diferentes siervos de Dios. Sólo el Señor es el juez de la obra del hombre, y él dará a cada uno su justa recompensa.

EL APÓSTOL, CONTINUANDO, Se Refirió Directamente A Las Comparaciones que se habían hecho entre sus labores y las de Apolos: "Esto empero, hermanos, he pasado por ejemplo en mí y en Apolos por amor de vosotros; para que en nosotros aprendáis a no saber más de lo que está escrito, hinchándoos por causa de otro el uno contra el otro. Porque ¿quién te distingue? ¿o qué tienes que no hayas recibido? Y si lo recibiste, ¿de qué te glorías como sino hubieras recibido?" (1 Cor. 4:6,7).

PABLO EXPUSO CLARAMENTE A LA IGLESIA los peligros y las penurias que él y sus asociados habían soportado pacientemente en su servicio por Cristo. "Hasta esta hora ­declaró él,­ hambreamos, y tenemos sed, y estamos desnudos, y somos heridos de golpes, y andamos vagabundos; y trabajamos, obrando con nuestras manos: nos maldicen, y bendecimos: padecemos persecución, y sufrimos: somos blasfemados, y rogamos: hemos venido a ser como la hez del mundo, el desecho de todos hasta ahora. No escribo esto para avergonzaros: mas amonéstoos como a mis hijos amados. Porque aunque tengáis diez mil ayos en Cristo, no tendréis muchos padres; que en Cristo Jesús yo os engendré por el evangelio." (1 Cor. 4:11-15).

EL QUE ENVÍA A LOS OBREROS EVANGÉLICOS como embajadores suyos es deshonrado cuando se manifiesta entre los oidores una fuerte adhesión hacia algunos pastores favoritos, al punto de haber mala voluntad para aceptar las labores de otros maestros. El Señor envía ayuda a sus hijos, no siempre de acuerdo con el agrado de ellos, sino según la necesitan; porque los hombres tienen una visión limitada y no pueden discernir lo que es para 225 su más alto bien. 

ES MUY RARO QUE UN MINISTRO POSEA TODAS LAS CUALIDADES necesarias para perfeccionar una iglesia según todos los requerimientos del cristianismo; por lo tanto, Dios a menudo le envía otros pastores, cada uno de los cuales posee algunas cualidades de que carecían los otros. La iglesia ha de aceptar con agradecimiento a estos siervos de Cristo, tal como aceptaría al Maestro mismo. Ha de tratar de sacar todos los beneficios posibles de la instrucción que de la Palabra de Dios le dé cada ministro.  

LAS VERDADES Que Los Siervos De Dios Presenten Han De Ser Aceptadas Y Apreciadas Con La Mansedumbre Propia De La Humildad, Pero Ningún Ministro Ha De Ser Idolatrado.

POR LA GRACIA DE CRISTO, los ministros de Dios son hechos mensajeros de luz y bendición. Cuando por oración ferviente y perseverante sean dotados por el Espíritu Santo y avancen cargados con la preocupación de la salvación de las almas, con sus corazones llenos de celo por extender los triunfos de la cruz, verán el fruto de sus labores.  

REHUSANDO RESUELTAMENTE desplegar sabiduría humana o exaltarse a sí mismos, realizarán una obra que soportará los asaltos de Satanás. Muchas almas se volverán de las tinieblas a la luz, y se establecerán muchas iglesias. Los hombres se convertirán, no al instrumento humano, sino a Cristo. El yo se mantendrá oculto; sólo Jesús, el Hombre del Calvario, aparecerá.

AQUELLOS QUE TRABAJAN POR CRISTO hoy día pueden revelar las mismas excelencias distintivas reveladas por los que en el tiempo apostólico proclamaron el Evangelio. 
Dios Está Tan Dispuesto A Dar El Poder A Sus Siervos Hoy Como Estaba Dispuesto A Darlo A Pablo Y Apolos, A Silas, A Timoteo, A Pedro, A Santiago Y Juan.

EN EL TIEMPO DE LOS APÓSTOLES había algunas mal inspiradas almas que pretendían creer en Cristo, pero rehusaban manifestar respeto a sus embajadores. Declaraban que no seguían al maestro humano, sino que eran enseñadas directamente por Cristo, sin la ayuda de los ministros del Evangelio. Eran 226 independientes de espíritu, y no estaban dispuestos a someterse a la voz de la iglesia. Tales hombres estaban en grave peligro de ser engañados.

DIOS HA PUESTO EN LA IGLESIA, como sus ayudadores señalados, hombres de diversos talentos, para que por la sabiduría combinada de muchos, pueda cumplirse la voluntad del Espíritu. Los hombres que proceden de acuerdo con sus propios rasgos fuertes de carácter, y rehúsan llevar el yugo con otros que han tenido larga experiencia en la obra de Dios, llegarán a cegarse por la confianza propia y a incapacitarse para discernir entre lo falso y lo verdadero. 

NO ES SEGURO ELEGIR A LOS TALES como dirigentes de la iglesia; porque seguirían su propio juicio y plan, sin importarles el juicio de sus hermanos. Es fácil para el enemigo trabajar por medio de aquellos que, necesitando consejo ellos mismos a cada paso, asumen el cuidado de las almas por su propia fuerza, sin haber aprendido la humildad de Cristo.

LAS IMPRESIONES SOLAS NO SON UNA GUÍA SEGURA DEL DEBER. A menudo el enemigo induce a los hombres a creer que es Dios quien los guía, cuando en realidad están siguiendo sólo el impulso humano. Pero si vigilamos cuidadosamente, si consultamos a nuestros hermanos, se hará comprender la voluntad del Señor; porque la promesa es: "Encaminará a los humildes por el juicio, y enseñará a los mansos su carrera." (Sal. 25:9).

EN LA IGLESIA CRISTIANA PRIMITIVA HABÍA ALGUNOS QUE REHUSABAN RECONOCER A PABLO Y A APOLOS, y sostenían que Pedro era su jefe. Afirmaban que Pedro había sostenido la más estrecha relación con Cristo cuando el Señor estuvo en la tierra, mientras que Pablo había perseguido a los creyentes. Las opiniones y los sentimientos de los tales estaban dominados por el prejuicio. No manifestaban la liberalidad, la generosidad, la ternura, que revelan que Cristo habita en el corazón.

HABÍA PELIGRO de que este ESPÍRITU PARTIDISTA produjera un gran mal en la iglesia cristiana; y el Señor le indicó a Pablo que pronunciara palabras de ferviente amonestación y solemne 227 protesta. A aquellos que decían: "Yo cierto soy de Pablo, pues yo de Apolos; y yo de Cefas, y yo de Cristo," el apóstol preguntó: "¿Está dividido Cristo? ¿Fue crucificado Pablo por vosotros? ¿o habéis sido bautizados en el nombre de Pablo?" "Así que, ninguno se gloríe en los hombres ­suplicó;­ porque todo es vuestro; sea Pablo, sea Apolos, sea Cefas, sea el mundo, sea la vida, sea la muerte, sea lo presente, sea lo por venir; todo es vuestro; y vosotros de Cristo; y Cristo de Dios." (1Cor. 1:12,13; 3:21-23).

PABLO Y APOLOS ESTABAN EN PERFECTO ACUERDO. El último estaba chasqueado y apenado por la disensión existente en la iglesia de Corinto; no se aprovechó de la preferencia que se le mostraba, ni la estimuló, sino que abandonó rápidamente el campo de lucha. Cuando Pablo, más tarde, le instó a visitar a Corinto, rehusó hacerlo, y no trabajó de nuevo allí hasta mucho tiempo después, cuando la iglesia había alcanzado una condición espiritual mejor. 228
Los Hechos De Los Apóstoles En La Proclamación 
Del Evangelio De Jesucristo. (EGW). MHP