domingo, junio 21, 2020

REFLEXIÓN 274. PROTECCIÓN CONTRA LOS ENEMIGOS OCULTOS (Salmo 140).


El Salmo 140, es el cántico del salmista, por el pedido deliberación 
y protección de sus enemigos ocultos y sin escrúpulos.

Al músico principal. Salmo de David.
1 LIBRAME, oh Jehová, del hombre malo; Guárdame de hombres violentos,
2 Los cuales maquinan males en el corazón,
Cada día urden contiendas.
3 Aguzaron su lengua como la serpiente;
Veneno de áspid hay debajo de sus
labios.  Selah

4 Guárdame, oh Jehová, de manos del impío; Líbrame de hombres injuriosos, 
Que han pensado trastornar mis pasos.
5 Me han escondido lazo y cuerdas los soberbios;
 Han tendido red junto a la senda; puesto lazos. Selah

6 He dicho a Jehová: Dios mío eres tú; Escucha, oh Jehová, la voz de mis ruegos.
7 Jehová Señor, potente salvador mío, Tú pusiste a cubierto mi cabeza en el día de batalla.
8 No concedas, oh Jehová, al impío sus deseos; No saques adelante su pensamiento, 
para que no se ensoberbeza. Selah

9 En cuanto a los que por todas partes me rodean, La maldad de sus propios labios cubrirá su cabeza.
10 Caerán sobre ellos brasas; Serán echados en el fuego, En abismos profundos de donde no salgan.
11 El hombre deslenguado no será firme en la tierra; El mal cazará al hombre injusto para derribarle.
12 Yo sé que Jehová tomará a su cargo la causa del afligido, Y el derecho de los necesitados.
13 Ciertamente los justos alabarán tu nombre; Los rectos morarán en tu presencia. (Salmo 140).
  
*La realidad de la existencia de los enemigos en la vida del cristiano es innegable.
 Es un hecho, y un hecho existe, Creas o no.
Entonces el salmista va a lo seguro. Al único que puede protegerlo de los enemigos ocultos. 
Que se esconden como serpientes bajo el disfraz de buenos amigos o amigas.

¡Cuántos son engañados en la vida! creyendo lograr alcanzar sus adorados sueños; 
Pero se golpean con la realidad del engaño y decepción sin límites.

Pero el salmista es persistente y perseverante en sus pedidos al Señor 
y ruega que los enemigos no tengan éxito.
Algo es real y seguro es en la vida: “Todos cosechamos lo que sembramos, es inevitable rehuirlo”. 
Y el salmista está seguro que el malvado recibirá su merecido.
Al final los que obran rectamente serán recompensados por el Señor. Amen.
Ministerio Hno. Pio

No hay comentarios.:

Publicar un comentario