REFLEXIÓN 275. PEDIDO PARA SER GUARDADO DEL MAL (Salmo 141).

El Salmo 141, presenta el pedido del salmista para ser guardado del mal 
y mantenerse fiel a Dios.

Salmo de David

1 JEHOVA, a ti he clamado; apresúrate a mí; Escucha mi voz cuando te invocare.

2 Suba mi oración delante de ti como el incienso, El don de mis manos como la ofrenda de la tarde.

3 Pon guarda a mi boca, oh Jehová; Guarda la puerta de mis labios.

4 No dejes que se incline mi corazón a cosa mala, 
A hacer obras impías Con los que hacen iniquidad; 
Y no coma yo de sus deleites.

5 Que el justo me castigue, será un favor, Y que me reprenda será un excelente bálsamo Que no me herirá la cabeza; Pero mi oración será continuamente contra las maldades de aquéllos.

6 Serán despeñados sus jueces, Y oirán mis palabras, que son verdaderas.

7 Como quien hiende y rompe la tierra, Son esparcidos nuestros huesos a la boca del Seol.

8 Por tanto, a ti, oh Jehová, Señor, miran mis ojos; En ti he confiado; no desampares mi alma.

9 Guárdame de los lazos que me han tendido, Y de las trampas de los que hacen iniquidad.

10 Caigan los impíos a una en sus redes. Mientras yo pasaré adelante.

*El Salmo 141, es una plegaria en demanda de dirección y ayuda. El salmista ruega al Señor que lo acepte (Gen. 1, 2) y que preserve la pureza de sus palabras (vers. 3, 4); reconoce el valor de las reprensiones que le hagan los justos (vers. 5), y termina pidiendo que Dios lo libre de las crueles estratagemas de sus enemigos (vers. 7-10). 3CBA

Vers. 1-4. Éste salmo presenta la lucha permanente del que confía en Dios 
y la posibilidad de caer en el camino de la maldad.

Presenta las trampas que ponen los enemigos a lo largo del camino de la vida.

Por ello es vital la respuesta divina, para que lo libre de hablar y obrar maldad en asociación de los que se deleitan en el mal o hacen iniquidad (inicuo. Gr. ho ánomos, literalmente "el sin ley").

Vers. 5. Pocos son los que reprenden al amigo directamente, cuando está andando mal. Y eso valora el salmista en el. Pero encontró que la oración es el arma más efectiva para lidiar contra la maldad.

Vers. 6. Y la consecuencia natural de obrar mal de los conocen la ley de Dios, 
pero actúan en contra de ella, será la muerte.

Vers. 7. Porque al final todos vamos a morir dice el salmista, pero la diferencia es como morimos. ¿Verdad? Con esperanza o perdidos.

Vers. 8-10. La confianza total en Dios, es la esperanza que mueve este salmo y a su autor. 
Y reitera su pedido para que lo guarde de las trampas de sus enemigos que obran inicuamente 
y sus maldades se vuelvan contra ellos mismos.

Ministerio Hno. Pio