Isaías 39. Es El Epilogo En la Vida Del Rey Ezequías, quien
recibe a los enviados de Babilonia, que vinieron por causa de su curación milagrosa.
Donde ese día, amaneció dos veces; porque retrocedió el tiempo, el sol volvió 10
horas. Recuerden que Israel y Babilonia tienen el mismo horario. (38:8).
En el capítulo anterior decíamos que el rey era también incrédulo…
justamente porque para confiar en la palabra de Dios, que sería sanado de su
mal, requería una señal que sería cierta su sanidad. Ahora ante los enviados de un rey pagano; se enorgullece
y se anota todos los logros para él, y por él; Y se olvida de darle la gloria a
Dios, de quien viene todo.
Nuestro deber en la vida es darle toda la gloria a Dios. de lo
contrario es incredulidad y no fe real. ¿Alguna vez nos tocó vivir semejante
desastre en la fe? Creo, que a más de uno. Por eso la única seguridad, es tomar
la palabra de Jesús, cuando dice: “Velad y orad”. Hoy podemos ser victoriosos;
pero mañana podríamos fracasar terriblemente, como lo fue Ezequías. Que su
gracia nos sostenga siempre. Amen.
Éste capítulo es una narración breve, pero con un significado muy
grande en sus consecuencias; porque afectan la vida del pueblo de Dios, por
generaciones...
En Versículos
(1-2). Merodac-baladán manda enviados a visitar a Ezequías, a raíz de su
milagrosa curación, y se entera de los tesoros que tiene el rey. Y del (3-8). Es
la sentencia del Señor por medio de Isaías, a esta ingratitud del rey; por no
mostrar al verdadero benefactor de sus logros y éxitos en su vida y nación
(Dios) y atribuirse solo a él; toda la gloria. Isaías anuncia la cautividad de
Judá por parte de Babilonia.
1 EN AQUEL tiempo Merodac-baladán hijo de Baladán, rey de Babilonia, envió cartas y presentes a Ezequías; porque supo que había estado enfermo, y que había convalecido. 2 Y se regocijó con ellos Ezequías, y les mostró la casa de su tesoro, plata y oro, especias, ungüentos preciosos, toda su casa de armas, y todo lo que se hallaba en sus tesoros; no hubo cosa en su casa y en todos sus dominios, que Ezequías no les mostrase.
3 Entonces el profeta Isaías vino al rey Ezequías, y le dijo: ¿Qué dicen estos hombres, y de dónde han venido a ti? Y Ezequías respondió: De tierra muy lejana han venido a mí, de Babilonia. 4 Dijo entonces: ¿Qué han visto en tu casa? Y dijo Ezequías: Todo lo que hay en mi casa han visto, y ninguna cosa hay en mis tesoros que no les haya mostrado. 5 Entonces dijo Isaías a Ezequías: Oye palabra de Jehová de los ejércitos: 6 He aquí vienen días en que será llevado a Babilonia todo lo que hay en tu casa, y lo que tus padres han atesorado hasta hoy; ninguna cosa quedará, dice Jehová. 7 De tus hijos que saldrán de ti, y que habrás engendrado, tomarán, y serán eunucos en el palacio del rey de Babilonia. 8 Y dijo Ezequías a Isaías: La palabra de Jehová que has hablado es buena. Y añadió: A lo menos, haya paz y seguridad en mis días. (Isaías 39).
1. Merodac-Baladán. Ver com. 2 Rey. 20: 12; también t. II, p. 89. Este
nombre es común en las inscripciones asirias de Sargón y Senaquerib.
Merodac-baladán, originalmente rey de Bit-Yakin, un pequeño Estado al norte del
golfo Pérsico, reinó en Babilonia desde el año 721 hasta el 709, y más tarde
por un corto tiempo, en el año 703. Cuando se enfermó Ezequías y fueron
enviados los mensajeros, era un rey exiliado. Como Ezequías había resistido tan
decididamente a Senaquerib, Merodac-baladán consideraba que el rey de Judá
podría serle un valioso aliado.
A
primera vista parecía que los enviados venían a felicitar a Ezequías por su
restablecimiento, pero es muy probable que también quisieran conseguir su ayuda
en la dura lucha que sostenían para impedir que Asiria dominara todo el Cercano
Oriente.
2. Se Regocijó Con Ellos Ezequías. Esta atención inesperada de un rey de Babilonia tocó su
vanidad, y se alegró de que otros también quisieran resistir a Asiria. Por lo
tanto, Ezequías recibió a los mensajeros babilonios como aliados y amigos, sin
imaginarse que dentro de poco tiempo Babilonia reemplazaría a Asiria como gran
potencia en el Cercano Oriente y que uno de sus reyes conquistaría a Judá.
Le Mostró La Casa. Ver com. 2 Rey. 20: 13 en cuanto a la insensatez de
Ezequías al haber hecho esto.
3. El Profeta Isaías Vino. Compárese este mensaje con lo que Isaías había
presentado antes en cuanto a las alianzas con países extranjeros (cap. 8: 9-13;
30: 1-7; 31: 1-5).
4. ¿Qué Han Visto? Ver com. 2 Rey. 20:15. Salomón había previsto el
tiempo cuando vendrían personas de tierras distantes para aprender del Dios de
Israel (1 Rey. 8: 41-43; también pp. 30-31). Al no aprovechar Ezequías esta
oportunidad para testificar del Dios verdadero, demostró que no sentía
verdadera gratitud por la bendición de la salud que le había sido devuelta
(Isa. 38: 1, 9).
6. Será Llevado A Babilonia. Ver com. 2 Rey. 20: 17.
7. Tus hijos. Ver com. 2 Rey. 20: 18.
8. La palabra . . .es buena. Esta actitud refleja el egoísmo del rey (ver com. 2
Rey. 20: 19).
Paz y seguridad. Ver com. 2 Rey. 20: 19. Ezequías se consoló con la
idea que Dios le concedería la gracia de demorar el castigo. Muchas veces Dios
ha postergado la ejecución de una sentencia cuando los hombres se han
arrepentido y se han mostrado sumisos al Señor (1 Rey. 21: 28-29; 2 Rey. 22:
18-20). 4CBA/Ministerio Hno. Pio
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