Lutero dijo del Salmo 37:
"Aquí está la paciencia de los santos".
En Este Salmo Se Considera El Problema Del Aparente Triunfo De Los Impíos, dificultad que se resuelve en el pensamiento del salmista cuando reconoce que dicha prosperidad es transitoria. Se nos aconseja a que desarrollemos nuestra confianza en Dios a medida que maduramos, que pasan los años. (vers. 25), pues él a su debido tiempo castigará a los pecadores
y recompensará a los justos.
"Aquí está la paciencia de los santos".
En Este Salmo Se Considera El Problema Del Aparente Triunfo De Los Impíos, dificultad que se resuelve en el pensamiento del salmista cuando reconoce que dicha prosperidad es transitoria. Se nos aconseja a que desarrollemos nuestra confianza en Dios a medida que maduramos, que pasan los años. (vers. 25), pues él a su debido tiempo castigará a los pecadores
y recompensará a los justos.
El salmo es un desarrollo, en
forma de acróstico...
La estructura acróstica es bastante regular. Cada letra del alfabeto hebreo encabeza una estrofa que consta regularmente de dos líneas, pero que en castellano (salvo los vers. 7, 20, 34) es de dos versículos…
La estructura acróstica es bastante regular. Cada letra del alfabeto hebreo encabeza una estrofa que consta regularmente de dos líneas, pero que en castellano (salvo los vers. 7, 20, 34) es de dos versículos…
El tema del Sal. 37 es similar al
del 73 y al mensaje del libro de Job, en donde se considera la justicia de Dios
en su trato con los hombres, tanto con los que le sirven como con los que lo
rechazan.
LA PACIENCIA DE LOS SANTOS.
1 NO TE
impacientes a causa de los malignos,
Ni tengas envidia de los que hacen
iniquidad.
2 Porque como hierba serán pronto
cortados, Y como la hierba verde se secarán.
3 Confía
en Jehová, y haz el bien;
Y habitarás en la tierra, y te
apacentarás de la verdad.
4 Deléitate asimismo en Jehová,
Y él te concederá
las peticiones de tu corazón.
5 Encomienda
a Jehová tu camino,
Y confía en él; y él hará.
6 Exhibirá tu justicia como la
luz,
Y tu derecho como el mediodía.
7 Guarda
silencio ante Jehová, y espera en él.
No te alteres con motivo del que prospera en su
camino,
Por el hombre que hace maldades.
8 Deja la ira, y desecha el enojo;
No te excites en manera alguna a
hacer lo malo.
*1. NO TE IMPACIENTES. "No te acalores" (BJ). No debemos preocuparnos por el aparente
triunfo de los impíos (ver Prov. 24: 19).
Como cristianos deberíamos ganar la victoria sobre la impaciencia,
porque al impacientarnos perdemos la perspectiva de las cosas y la claridad de
visión. Más aún cuando nos enojamos con
el pecador, no podemos ayudarlo; y además, nos ponemos de parte del error.
3. Confía. Los mejores antídotos para la impaciencia son la confianza
en Dios y hallarse siempre ocupado en lo que tiene valor ante Dios y para el
prójimo.
Habitarás. En hebreo el verbo aparece en imperativo:
"habita", "vive". La
orden de Dios garantiza la permanencia en la tierra. No se necesita vagar en busca de seguridad.
Te apacentarás. También está en imperativo:
"apaciéntate", "aliméntate". Algunos prefieren traducir "aliméntate
de fidelidad".
EN ESTE VERSÍCULO se presentan cuatro reglas para mantener la paz
mental cuando se está perplejo por la aparente prosperidad de los impíos:
(a) confiar en Dios,
(b) mantenerse ocupado
haciendo el bien,
(c) vivir tranquilamente en el lugar donde Dios nos sitúe, y
(d) buscar la fidelidad de Dios.
4. Deléitate. Si escogemos y amamos lo que Dios ama, nos
gozaremos en nuestros deseos o peticiones.
Con referencia a la identificación de nuestros pensamientos y nuestras
731 metas con los planes que Dios tiene para
nosotros, ver DTG 621.
nosotros, ver DTG 621.
5. Encomienda a Jehová. Ver com. Sal.
22: 8; cf. 1 Ped. 5: 7. Si la carga nos resulta demasiado pesada, no tenemos
más que echarla sobre el Señor. David Livingstone declaró que este versículo lo sostenía en todo
momento, tanto en África como en Inglaterra.
6. Justicia. Si confiamos en Dios
cuando se nos calumnia, él hará que las nubes se disipen a fin de que nuestro
verdadero carácter, nuestros verdaderos motivos, sean tan claros como la luz
del sol a mediodía (ver Jer. 51: 10).
7. Guarda silencio. Si guardáramos silencio podríamos
oír en la quietud la voz de Dios que nos habla para aquietarnos.
8. Deja la ira. El salmista sigue dando consejos acerca de cómo
debemos considerar a los impíos. No
hemos de albergar sentimientos de ira contra ellos ni contra Dios porque les
concede un poco más de tiempo. Su
castigo final está en las manos de Dios. La ira y la impaciencia llevan a cometer
pecado. El mal que se fomenta en
el corazón es pecado, y conduce al acto pecaminoso manifiesto.
LA SUERTE DE LOS IMPÍOS
9 Porque los malignos serán
destruidos,
Pero los que esperan en Jehová,
ellos heredarán la tierra.
10 Pues
de aquí a poco no existirá el malo;
Observarás su lugar, y no estará allí.
11 Pero los mansos heredarán la
tierra,
Y se recrearán con abundancia de
paz.
12 Maquina el impío contra el
justo,
Y cruje contra él sus dientes;
13 El Señor se reirá de él;
Porque ve que viene su día.
14 Los impíos desenvainan espada y
entesan su arco, Para derribar al pobre y al menesteroso, Para matar a los de
recto proceder.
15 Su espada entrará en su mismo
corazón,
Y su arco será quebrado.
*Los vers. 9-15 tratan
principalmente de la suerte de los impíos.
Pues de aquí a poco no existirá el malo. Estas palabras se cumplirán cuando Dios extermine a
los malhechores y elimine el pecado del universo (ver DTG 712; CS 599).
El mal es como un bumerán: vuelve
sobre el impío
(ver Sal. 7: 15, 16; 9: 15; cf.
Est. 7: 10).
SUERTE FINAL DE LOS PIADOSOS.
16 Mejor
es lo poco del justo,
Que las riquezas de muchos pecadores.
17 Porque los brazos de los impíos
serán quebrados;
Mas el que sostiene a los justos es Jehová.
18 Conoce
Jehová los días de los perfectos,
Y la heredad de ellos será para
siempre.
19 No serán avergonzados en el mal
tiempo,
Y en los días de hambre serán
saciados.
20 Mas los impíos perecerán,
Y los enemigos de Jehová como la
grasa de los carneros. Serán consumidos; se disiparán como el humo.
21 El impío toma prestado, y no
paga;
Mas el justo tiene misericordia, y
da.
22 Porque
los benditos de él heredarán la tierra;
Y los malditos de él serán destruidos.
23 Por
Jehová son ordenados los pasos del hombre,
Y él aprueba su camino.
24 Cuando el hombre cayera, no
quedará postrado,
Porque Jehová sostiene su mano.
25 Joven
fui, y he envejecido,
Y no he visto justo desamparado,
Ni su descendencia que mendigue pan.
26 En todo tiempo tiene
misericordia, y presta;
Y su descendencia es para bendición.
27 Apártate
del mal, y haz el bien,
Y vivirás para siempre.
28 Porque Jehová ama la rectitud,
Y no desampara a sus santos.
Para siempre serán guardados;
Más la descendencia de los impíos
será destruida.
29 Los justos heredarán la tierra,
Y vivirán para siempre sobre ella.
30 La boca del justo habla
sabiduría,
Y su lengua habla justicia.
31 La
ley de su Dios está en su corazón;
Por tanto, sus pies no resbalarán.
32 Acecha el impío al justo,
Y procura matarlo.
33 Jehová no lo dejará en sus
manos,
Ni lo condenará cuando le
juzgaren.
34 Espera
en Jehová, y guarda su
camino,
Y él te exaltará para heredar la
tierra;
Cuando sean destruidos los pecadores, lo verás.
*En los vers. 16-34 el tema
principal es la suerte final de los piadosos.
Dios sabe lo que les ocurre a los
"perfectos" todos los días (una metonimia). Ver com.
Sal. 31: 15.
24. Cuando el hombre cayere. Aunque
probablemente el salmista se refiriera en primer lugar a la persona que cae en
alguna situación desafortunada, en el chasco o en la calamidad (ver com. Sal. 34: 19), también podría haber aludido a
la caída en el pecado. El justo no está
exento de pecado; pero cuando yerra, inmediatamente toma las medidas necesarias
para rectificar su error. "Cuando
estemos vestidos con la justicia de Cristo no nos deleitaremos en el pecado,
pues Cristo estará obrando con nosotros.
Quizá cometamos errores, pero odiaremos el pecado que causó el
sufrimiento del Hijo de Dios" (MJ 336).
25. Joven fui, y he envejecido. Este testimonio es el fruto de una minuciosa y
continua observación que el salmista ha hecho a lo largo de su vida. Este pasaje indica que David escribió este
poema en sus últimos años. No es que los
justos no pasan privaciones, sino que Dios no los abandona cuando sufren. A la larga prosperan porque su descendencia
tiene lo que necesita. El salmista
enuncia aquí una verdad general: La
Verdadera Religión Hace Que La Persona Sea Activa E Independiente, Y La Libra
De Tener Que Mendigar Para Subsistir.
Cf. con el cuadro opuesto de Job (cap. 15: 20, 23).
27. Apártate del mal, y haz el bien, Y vivirás para siempre. Este versículo encierra la lección de todo el salmo
(ver Sal. 34: 14).
(ver Sal. 34: 14).
29. Los justos heredarán la tierra, Y vivirán para siempre sobre ella. Finalmente se vindicará la
rectitud y los santos verán el triunfo de la verdad. Esto no necesariamente debe entenderse como
una expresión de venganza, sino más bien como una profecía del triunfo final de
la justicia y del amor de Dios (ver Mal. 4: 3).
EL FUTURO DEL IMPÍO Y EL JUSTO.
35 Vi yo al impío sumamente
enaltecido,
Y que se extendía como laurel
verde.
36 Pero él pasó, y he aquí ya no
estaba;
Lo busqué, y no fue hallado.
37 Considera al íntegro, y mira al
justo;
Porque hay un final dichoso para
el hombre de paz.
38 Mas los transgresores serán
todos a una destruidos; La posteridad de los impíos será extinguida.
39 Pero la salvación de los justos
es de Jehová, Y él es su fortaleza en el tiempo de la angustia.
40 Jehová los ayudará y los
librará;
Los libertará de los impíos, y los
salvará,
Por cuanto en él esperaron.
Salmo 37
*35. Vi yo al impío sumamente
enaltecido...
36 Pero él pasó... El salmista está pensando en el fin del justo, que
será el triunfo, en contraste con el triste fin del impío, tal como se expresa
en el siguiente versículo.
El paralelismo antitético resulta claro.
El paralelismo antitético resulta claro.
38. La posteridad de los impíos. Nótese el agudo contraste con el fin
de los justos, cuya posteridad permanece.
39. Fortaleza. O "lugar de refugio". A pesar del aparente triunfo de los impíos,
Dios es un refugio para los justos. Los
que en él confían serán liberados finalmente.
40. Jehová los ayudará y los librará;
Los libertará de los impíos, y los salvará,
Por cuanto en él esperaron.
*AL ESTUDIAR este salmo es bueno recordar que esta vida es la
escuela que nos prepara para la vida venidera, o sea un preludio del drama de
la vida eterna. Al final, los justos
saldrán bien.
¡Qué bueno es Dios!
que nos muestra para nosotros hoy, Lo que será al fin, el destino final de los
que proceden mal y los que confían en Dios y viven conforme a su voluntad.
¿En qué bando estas?
¡Camina ya, por el sendero del bien y serás un
ganador! Porque sigues a un ganador: “Cristo
Jesús” Amen. 3CBA
Ministerio Hno. Pio
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