martes, noviembre 24, 2020

REFLEXIÓN 479. PROFECÍAS REFERENTES A JUDÁ Y JERUSALÉN: CONFLICTOS CON FALSOS PROFETAS: La Lucha Con Los Falsos Profetas En Babilonia (JEREMÍAS 29).

Jeremías 29. Es la Carta de Jeremías a los exiliados en Babilonia. Para que entiendan que estarán muchos años en ese lugar. No como dicen los falsos profetas que serán poco tiempo. Uno de esos falsos profetas que enseña lo contrario al mensaje de Jeremías es Semaías, uno de los falsos profetas con mucha influencia en el pueblo cautivo. Y a éste se manda un mensaje que terminará mal por usar falsamente la palabra de Dios y por ser disoluto.

Es Lamentable, que los cautivos sigan en la misma línea de pensamiento, que los llevó a ese lugar de vivir cautivos en tierras extrañas. Están en la línea de la rebelión a la palabra expresa de Dios; escuchando a los falsos profetas que fueron causa de su desgracia. ¿Porque no es posible cambiar? Están cautivos como dijo Dios por medio del profeta Jeremías… pero, aun así, se mantienen en su obstinación, como si no tuvieran nada de materia gris, solo siendo seres autómatas. Es terrible lo que puede hacer el pecado de rebelión, que es igual a la idolatría y oscuridad. (1 Samuel 15:23). Los fasos profetas siguen en actividad tanto en Jerusalén y en Babilonia….

Vers. (1-7) Jeremías envía una carta a los cautivos en Babilonia instándoles para que quietamente vivan allí (8-9) y no crean en los sueños de sus profetas, (10-14) y para que regresen en paz después de los setenta años. (15-19) Predice, por causa de su desobediencia, la destrucción del resto que ha quedado en Jerusalén. (20-23) Señala el temible fin de Acab y Sedequías, falsos profetas. (24-29) Semaías escribe una carta contra jeremías. (30-32) Jeremías predice su condena.

1 ESTAS son las palabras de la carta que el profeta Jeremías envió de Jerusalén a los ancianos que habían quedado de los que fueron transportados, y a los sacerdotes y profetas y a todo el pueblo que Nabucodonosor llevó cautivo de Jerusalén a Babilonia 2 (después que salió el rey Jeconías, la reina, los del palacio, los príncipes de Judá y de Jerusalén, los artífices y los ingenieros de Jerusalén), 3 por mano de Elasa hijo de Safán y de Gemarías hijo de Hilcías, a quienes envió Sedequías rey de Judá a Babilonia, a Nabucodonosor rey de Babilonia. Decía: 4 Así ha dicho Jehová de los ejércitos, Dios de Israel, a todos los de la cautividad que hice transportar de Jerusalén a Babilonia: 5 Edificad casas, y habitadlas; y plantad huertos, y comed del fruto de ellos. 6 Casaos, y engendrad hijos e hijas; dad mujeres a vuestros hijos, y dad maridos a vuestras hijas, para que tengan hijos e hijas; y multiplicaos ahí, y no os disminuyáis. 7 Y procurad la paz de la ciudad a la cual os hice transportar, y rogad por ella a Jehová; porque en su paz tendréis vosotros paz.

8 Porque así ha dicho Jehová de los ejércitos, Dios de Israel: No os engañen vuestros profetas que están entre vosotros, ni vuestros adivinos; ni atendáis a los sueños que soñáis. 9 Porque falsamente os profetizan ellos en mi nombre; no los envié, ha dicho Jehová.

10 Porque así dijo Jehová: Cuando en Babilonia se cumplan los setenta años, yo os visitaré, y despertaré sobre vosotros mi buena palabra, para haceros volver a este lugar. 11 Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis. 12 Entonces me invocaréis, y vendréis y oraréis a mí, y yo os oiré; 13 y me buscaréis y me hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro corazón. 14 Y seré hallado por vosotros, dice Jehová, y haré volver vuestra cautividad, y os reuniré de todas las naciones y de todos los lugares adonde os arrojé, dice Jehová; y os haré volver al lugar de donde os hice llevar.

15 Mas habéis dicho: Jehová nos ha levantado profetas en Babilonia. 16 Pero así ha dicho Jehová acerca del rey que está sentado sobre el trono de David, y de todo el pueblo que mora en esta ciudad, de vuestros hermanos que no salieron con vosotros en cautiverio; 17 así ha dicho Jehová de los ejércitos: He aquí envío yo contra ellos espada, hambre y pestilencia, y los pondré como los higos malos, que de tan malos no se pueden comer. 18 Los perseguiré con espada, con hambre y con pestilencia, y los daré por escarnio a todos los reinos de la tierra, por maldición y por espanto, y por burla y por afrenta para todas las naciones entre las cuales los he arrojado; 19 por cuanto no oyeron mis palabras, dice Jehová, que les envié por mis siervos los profetas, desde temprano y sin cesar; y no habéis escuchado, dice Jehová.

20 Oíd, pues, palabra de Jehová, vosotros todos los transportados que envié de Jerusalén a Babilonia. 21 Así ha dicho Jehová de los ejércitos, Dios de Israel, acerca de Acab hijo de Colaías, y acerca de Sedequías hijo de Maasías, que os profetizan falsamente en mi nombre: He aquí los entrego yo en mano de Nabucodonosor rey de Babilonia, y él los matará delante de vuestros ojos. 22 Y todos los transportados de Judá que están en Babilonia harán de ellos una maldición, diciendo: Póngate Jehová como a Sedequías y como a Acab, a quienes asó al fuego el rey de Babilonia. 23 Porque hicieron maldad en Israel, y cometieron adulterio con las mujeres de sus prójimos, y falsamente hablaron en mi nombre palabra que no les mandé; lo cual yo sé y testifico, dice Jehová.

24 Y a Semaías de Nehelam hablarás, diciendo: 25 Así habló Jehová de los ejércitos, Dios de Israel, diciendo: Tú enviaste cartas en tu nombre a todo el pueblo que está en Jerusalén, y al sacerdote Sofonías hijo de Maasías, y a todos los sacerdotes, diciendo: 26 Jehová te ha puesto por sacerdote en lugar del sacerdote Joiada, para que te encargues en la casa de Jehová de todo hombre loco que profetice, poniéndolo en el calabozo y en el cepo. 27 ¿Por qué, pues, no has reprendido ahora a Jeremías de Anatot, que os profetiza? 28 Porque él nos envió a decir en Babilonia: Largo será el cautiverio; edificad casas, y habitadlas; plantad huertos, y comed el fruto de ellos. 29 Y el sacerdote Sofonías había leído esta carta a oídos del profeta Jeremías.

30 Y vino palabra de Jehová a Jeremías, diciendo: 31 Envía a decir a todos los cautivos: Así ha dicho Jehová de Semaías de Nehelam: Porque os profetizó Semaías, y yo no lo envié, y os hizo confiar en mentira; 32 por tanto, así ha dicho Jehová: He aquí que yo castigaré a Semaías de Nehelam y a su descendencia; no tendrá varón que more entre este pueblo, ni verá el bien que haré yo a mi pueblo, dice Jehová; porque contra Jehová ha hablado rebelión. (Jeremías 29).

1. Las Palabras De La Carta. Esta carta fue enviada por Jeremías a los cautivos en Babilonia (2 Rey. 24: 8-16; 2 Crón. 36: 5-8; Dan. 1: 14), quizá no mucho después de que Joaquín fuera llevado prisionero (ver com. vers. 2). Jeremías, despreciado y rechazado por sus hermanos en Jerusalén, dirige su atención a los exiliados.

Los Ancianos Que Habían Quedado. Una prueba de que no todos los dirigentes habían sido llevados al exilio (Eze.  8: 1; 20: 1).

2. Después Que Salió... Jeconías. Ver com. cap. 22: 24. Es probable que esto se escribiera en los comienzos del reinado de Sedequías, y por lo tanto antes de los acontecimientos de los cap. 27 y 28 (ver com. cap. 27: 1; 28: 1).

La Reina. La reina madre (ver com. cap. 13: 18), Nehusta, madre de Joaquín y esposa de Joacim, quien fue llevada al cautiverio junto con el rey, su hijo (2 Rey. 24: 8, 12, 15).

Los Artífices Y Los Ingenieros. Ver com. cap. 24: 1.

3. Por Mano De. Estos dos, Elasa y Gemarías, evidentemente eran amigos de Jeremías y lo apoyaban, y era natural que Jeremías les encomendara sus mensajes para los desterrados en Babilonia. Es probable que Elasa, "hijo de Safán", fuera hermano de Ahicam, protector de Jeremías (ver com. cap. 26: 24). Quizá Gemarías era hijo de aquel Hilcías, sumo sacerdote durante el reinado de Josías, que halló el libro de la ley y tuvo una parte importante en la obra de reforma (2 Rey. 22; 2 Crón. 34). La carta fue enviada desde Jerusalén (cap. 29: 1).

4. Hice Transportar. El profeta informa a los cautivos que no contraría la voluntad de Dios que ellos estén cautivos en ese tiempo.  Por eso ellos deben aceptar tranquilamente su suerte y sacar todo el provecho posible de la situación.

5. Edificad. La necesidad de dar este consejo indica que, como sus hermanos en Judea (cap. 28), los judíos desterrados en Babilonia estaban desesperados y no querían someterse a los caldeos, sus conquistadores. Esta actitud fue apoyada por los falsos profetas que había entre ellos, quienes instaban al pueblo a no someterse. Jeremías aconsejó a los cautivos que aceptaran con paciencia esa servidumbre.

6. Para Que Tengan Hijos. El nacimiento de nietos en el exilio muestra que su cautiverio duraría por lo menos dos generaciones. También revelaba que los cautivos tendrían relativa paz para atender sus asuntos, porque sus vencedores les permitirían poseer casas y tierra (ver com. vers. 5). El favor real que se prodigó a Daniel debe haber sido un factor importante para mejorar la situación de los judíos cautivos.

7. Paz. Ver com. cap. 6: 14. Sin duda que les era muy difícil a los cautivos orar por los babilonios pues aquellos tenían, naturalmente, resentimiento contra sus conquistadores (cf. Sal. 137). Dios manifestó hacia los caldeos el mismo espíritu bondadoso y tolerante que 491 Jesús más tarde practicó con los inhospitalarios samaritanos (Luc. 9: 54-56).

8. Profetas... Adivinos. Dos clases de engañadores que practicaban sus mentiras en Babilonia como lo habían hecho en Judea. Predecían que los judíos pronto serían librados de su cautiverio (cap. 28: 1-3). Los "adivinos" se jactaban de que predecían el futuro mediante diversos métodos de interpretación de señales y augurios (ver com. Dan. 1: 20).

Que Soñáis. Heb., "que vosotros hacéis soñar". Después de todo, esos sueños engañosos eran lo que los israelitas deseaban oír, con lo cual daban énfasis al lamento divino: "mi pueblo así lo quiso" (Jer. 5: 31; Isa. 30: 9-10; Miq. 2: 11).

9. En Mi Nombre. Con impía temeridad e hipocresía, esos audaces engañadores pretendían hablar en nombre de Dios (ver com. cap. 14: 13).

10. Setenta Años. Para negar la ilusoria esperanza de que el destierro sería corto, Dios afirma nuevamente que su pueblo estaría cautivo durante 70 años (cf. cap. 25: 12). Cuando se pronunció este mensaje ya habían transcurrido unos 10 de los 70 años (ver com. cap. 25:1,12). Os Visitaré. Ver com. Sal. 8: 4; 59: 5. Cuando transcurrieran los 70 años -y no antes-, Dios haría cumplir su "buena palabra" de gracia y misericordia que había prometido, y haría regresar el pueblo a "este lugar"

11. Pensamientos De Paz. Ver com. cap. 6: 14. El cautiverio de los exiliados sería para su bien (ver com. cap. 24: 5-10). Dios aseguró y consoló a su pueblo con la promesa de que cuando terminaran los 70 años sus "ojos" estarían "sobre ellos para bien" (cap. 24: 6).

El Fin Que Esperáis. Literalmente, "postrimería y esperanza". En otras palabras, Dios promete a su pueblo escogido que todo le saldrá bien a pesar de su cautiverio. Si para hacer justicia el Señor tuvo que herir a sus hijos con el cautiverio, su amor y su misericordia los sanaría haciéndolos regresar a su patria (Deut. 32: 39; Job 5: 18; Ose. 6: 1).

13. De Todo Vuestro Corazón. Esta maravillosa promesa es un eco de Deut. 4: 29. Dios explica que no puede hacer nada en favor de su pueblo a menos que éste lo busque con un propósito sincero.

15. Profetas En Babilonia. Falsos profetas (ver com. vers. 21) a quienes esos jactanciosos preferían en lugar de Jeremías.

16. Del Rey. Es decir, de Sedequías.

17. Espada. Se menciona otra vez el triple azote de la guerra: espada, hambre y pestilencia (ver com. cap. 14: 12).

Malos. Heb. sho'ar, "reventado" o "podrido", "repulsivo". Se emplea una vez más la imagen de los "higos muy malos" (cap. 24: 2) para representar a los que han quedado en Judá después del cautiverio de Joaquín. Son higos inservibles, que no pueden comerse (ver com. cap. 24: 8-10).

18. Espada. Cf. vers. 17; ver com. cap. 14: 12.

Los Daré Por Escarnio. Heb., "los daré por terror" (ver com. cap. 24: 9).

Afrenta. Ver com. cap. 25: 9.

19. Desde Temprano. En cuanto al significado de esta frase (ver com. cap. 7: 13).

20. Envié. Ver com. vers. 4.

21. Acab... Y Sedequías. De estos falsos profetas únicamente se sabe lo que aquí se afirma. Quizá eran los caudillos del partido rebelde entre los exiliados.

Nabucodonosor. En cuanto a este nombre ver com. cap. 21: 2.

22. Asó Al Fuego. Es evidente que los babilonios empleaban a menudo este castigo contra los rebeldes traidores (Dan. 3: 6, 20). Los babilonios no habrían considerado ningún castigo como demasiado cruel para aplicarlo a esos falsos profetas, en caso de que hubieran sido agitadores de los cautivos rebeldes (ver com. vers. 21).

23. Maldad. "Fatuidad" (BJ) o "sacrilegio". La voz hebrea sugiere la idea de falta de castidad (Gén. 34: 7; Deut. 22: 21; Juec. 19: 23-24). Esto indica que Acab y Sedequías, caudillos del movimiento rebelde, así como sus correligionarios de Jerusalén, vivían una vida libertina y disoluta (Jer. 23: 14).

Yo Sé. Esos falsos dirigentes religiosos deben haber engañado al pueblo para que creyera que eran personas de buen carácter y moral. Si el adulterio de los falsos profetas hubiera sido público, habrían perdido la influencia que ejercían sobre el pueblo. Pero Dios presenta ante todos, la conducta pecaminosa de esos profetas apóstatas.

24. Hablarás, Diciendo. Parece que con el vers. 23 concluye la carta a los desterrados que comienza en el vers. 4, y se da principio a una nueva sección. El mensaje de Jeremías a los exiliados excitó la ira de los falsos profetas rivales en Babilonia, y se trazó un plan para matar a Jeremías.

Semaías. Evidentemente éste era uno de los que dirigían en Babilonia la oposición contra Jeremías. Sólo se sabe de él lo que aparece aquí.

Nehelam. Podría ser un lugar aún no identificado, o un antecesor de Semaías.

25. Tú Enviaste Cartas. Es posible que hubieran sido enviadas con los mensajeros nombrados en el vers. 3 cuando regresaron de Babilonia. Cuando los mensajes llegaron a Jerusalén, Jeremías fue informado del contenido, y su respuesta fue una dura reprensión para Semaías.

Sofonías. Este era el "segundo sacerdote" (Jer. 52: 24; cf. 2 Rey. 25: 18), por lo cual esperaba que su autoridad e influencia impidieran que Jeremías siguiera profetizando, y que además, fuera castigado por engañador. Sofonías representaba al rey en una especie de contemporización (Jer. 21: 1; 37: 3). Más tarde, cuando Nabuzaradán, "capitán de la guardia" de los babilonios, tomó a Jerusalén, Sofonías fue apresado y ejecutado (cap. 52: 24-27).

26. Joiada. Algunos sugieren que éste fue reemplazado por Sofonías porque no apoyaba la política del partido rebelde. Es probable que el "segundo sacerdote" tuviera el deber de preservar el orden en el templo y de castigar a los profetas impostores, razón por la cual Semaías reprendió a Sofonías por su tibieza y timidez en el cumplimiento de su cargo, ya que no acalló a Jeremías, el cual presenta aquí el contenido de las "cartas" de Semaías (vers. 25).

Todo Hombre Loco. Expresión despectiva aplicada con frecuencia a los impostores hipócritas (2 Rey. 9: 11; Ose. 9: 7).

En El Cepo. Ver com. cap. 20: 2.

28. Largo Será El Cautiverio. El hebreo sólo dice: "Es para largo" (BJ), pero evidentemente se alude al cautiverio (vers. 5, 10).

29. Había Leído Esta Carta. Sofonías lo hizo sin duda para advertir a Jeremías del complot de sus enemigos contra él, o para inducir al profeta a que moderara y suavizara sus palabras.

31. Envía A Decir A Todos. Parece indicarse aquí que era frecuente la comunicación entre Babilonia y Palestina.

32. Yo Castigaré A Semaías. No se especifica la forma de castigo que recibiría Semaías, como en los casos de Acab y Sedequías (vers. 21-22). 4CBA/Ministerio Hno. Pio


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